Evolución de configuraciones de brazos en drones DJI y eVTOL EHang

La industria de los drones y eVTOL ha experimentado una transición notable en las configuraciones de sus brazos y motores. Históricamente, muchos modelos profesionales empleaban múltiples brazos (hexacópteros de 6 brazos, octocópteros de 8 brazos, etc.) para lograr la elevación y redundancia necesarias. Sin embargo, con el avance tecnológico, se ha observado una migración sistemática hacia configuraciones de cuatro brazos (cuadricópteros) tanto en drones de DJI (en líneas prosumer, enterprise, agricultura, logística, cinematografía) como potencialmente en eVTOL de pasajeros. A continuación, se detalla esta evolución histórica, las mejoras técnicas que la posibilitaron (motores, baterías, control, materiales) y un análisis de hacia dónde podría dirigirse el diseño de eVTOL en el futuro, respaldado por fuentes oficiales.

Drones DJI: de hexacópteros y octocópteros a cuadricópteros

Antes (años 2010-2016): Los drones profesionales de DJI solían tener 6 u 8 brazos para cargar equipos pesados con mayor estabilidad y proveer redundancia ante fallos. Por ejemplo:

  • Cinematografía pesada: el DJI Spreading Wings S1000 era un octocóptero de ocho brazos plegables diseñado para cargar cámaras profesionales pesadas. De igual manera, el S900 (hexacóptero) y posteriormente el Matrice 600 (2016) de 6 brazos permitían llevar cámaras de cine o sensores LiDAR con mayor seguridad gracias a motores múltiples. Estos multirrotores podían tolerar la falla de un motor sin desplomarse inmediatamente, dado que contaban con propulsores restantes para estabilizar el vuelo.

  • Agricultura: el DJI Agras MG-1 (2015) y sus variantes iniciales empleaban 8 motores para levantar hasta 10 kg de pesticida . En particular, el MG-1P contaba con ocho rotores y algoritmos avanzados que le permitían seguir volando incluso si un brazo o motor fallaba, redirigiendo señales de control por canales redundantes . Esta configuración X8 (coaxial de 4 brazos con doble motor) ofrecía la necesaria redundancia en entornos agrícolas exigentes.

  • Enterprise/industrial: plataformas iniciales como la Matrice 100 (2015, cuadricóptero modular) convivían con modelos de más brazos para mayores prestaciones. El Matrice 200/210 (2017) aún era un cuadricóptero enfocado en inspecciones, pero para cargas mayores DJI ofrecía el Matrice 600 (M600), un hexacóptero de seis motores que brindaba mayor empuje y cierta tolerancia a fallos para aplicaciones industriales exigentes.

Ahora (2020-2023): Gracias a importantes mejoras en potencia, electrónica y control, DJI ha unificado sus nuevos diseños en configuraciones de cuatro brazos, incluso para tareas antes reservadas a hexacópteros u octocópteros. Ejemplos destacados de 2020 en adelante incluyen:

  • Enterprise y cinematografía: El buque insignia Matrice 300 RTK y su sucesor Matrice 350 RTK son cuadricópteros de cuatro brazos que reemplazaron efectivamente al M600 en muchas aplicaciones. A pesar de tener menos motores, el M300 RTK puede llevar hasta 3 cargas simultáneas (2,7 kg en total) – como cámaras duales y sensores adicionales – y lograr un tiempo de vuelo de 55 minutos (frente a ~33 min del anterior M210) . Estas mejoras se logran con motores más potentes, baterías duales de alta densidad y un control de vuelo más inteligente. DJI incluso implementó un modo de aterrizaje de emergencia con tres motores para manejar la falla de un motor en pleno vuelo: si un motor falla, el M300 RTK entra automáticamente en un modo especial que restablece la estabilidad haciendo girar el dron sobre su eje y desciende controladamente para aterrizar seguro . Esta innovación eliminó lo que históricamente era el “talón de Aquiles” de los cuadricópteros (la pérdida catastrófica de control ante la falla de un motor) al proporcionar una forma de posarse con solo tres de los cuatro motores operativos . Con esta clase de soluciones de software de control y redundancias electrónicas, DJI ha demostrado que un cuadricóptero bien diseñado puede operar con seguridad equiparable a diseños de más motores.

  • Agricultura: La serie Agras reciente también adoptó los cuatro brazos. Los modelos modernos como el Agras T40y T50 (2022-2023) introducen un diseño de cuatro brazos con rotores coaxiales gemelos en cada brazo(configuración X8), sumando 8 hélices en total . Esto les permitió sustituir a drones agrícolas octocópteros anteriores aumentando significativamente la capacidad. Por ejemplo, el Agras T40 puede cargar 40 L de agroquímicos (hasta ~50 kg), gracias a su diseño de doble hélice coaxial que incrementa en 30% la capacidad de carga respecto a diseños previos . Cada brazo porta dos motores contra-rotantes, combinando la redundancia de 8 motores con la simplicidad estructural de 4 brazos plegables. DJI destaca que el diseño coaxial reduce peso y complejidad estructural al tiempo que genera un empuje muy elevado en un tamaño compacto . El resultado son drones como el Agras T50 (40 L) de solo cuatro brazos capaces de cubrir hectáreas de cultivo con la eficiencia que antes requería plataformas más grandes. La electrónica redundante (sensores duales, sistemas anti-colisión, etc.) e importantes mejoras en baterías (packs de alta tensión de cambio rápido) garantizan que estas plataformas quad mantengan la seguridad operacional incluso con cargas pesadas. DJI pasó de 10 kg en el MG-1 (2015) a 40-50 kg en el T40/T50 (2023) sin aumentar el número de brazos, apoyándose en motores más potentes y mejores controladores ESC.

  • Logística: En 2023 DJI lanzó su primer dron de entrega de carga, el FlyCart 30, siguiendo la misma filosofía. El FlyCart 30 es un cuadricóptero coaxial pensado para transporte de paquetes, con cuatro brazos y un total de 8 rotores . Puede llevar hasta 30 kg de carga útil a distancias de 16–28 km según el peso , e incluye características de seguridad avanzadas como paracaídas de emergencia integrado y baterías duales intercambiables . Cada motor del FlyCart 30 entrega hasta 4000 W de potencia con hélices de 54 pulgadas, cifras que antes solo se lograban sumando más motores. Esto demuestra el grado de optimización alcanzado: con apenas cuatro brazos, este dron logra elevar 30 kg y volar en entornos hostiles (IP55, vientos de 12 m/s) donde antes se hubiesen requerido hexacópteros muy grandes. El diseño coaxial y la alta potencia por motor proporcionan redundancia (puede volar aunque falle un propulsor de los ocho) a la vez que simplifican la plataforma para un mantenimiento más fácil.

En resumen, DJI ha evolucionado de plataformas de 6–8 brazos a diseños de 4 brazos en casi todas sus líneas. Modelos modernos como Matrice 350 RTK, Agras T50 y FlyCart 30 ejemplifican cómo el cuadricóptero (a veces con motores coaxiales duales) se convirtió en el estándar incluso para usos profesionales exigentes. Esto fue posible gracias a mejoras en: motores (más eficientes y potentes, con mejor refrigeración y control FOC), baterías (mayor densidad energética y sistemas de gestión redundantes), ESCs/controladores (capaces de reaccionar a fallos en milisegundos y equilibrar empuje entre motores), materiales (chasis de fibra de carbono resistentes y ligeros) y software de control(algoritmos de estabilidad, pilotos automáticos avanzados, detección de fallos y modos de emergencia). DJI incluso documentó la eficacia de estas mejoras: por ejemplo, el M300 RTK puede estabilizarse y aterrizar de emergencia con solo tres motores operativos gracias a su algoritmo de control de última generación . Esto hace una década era impensable en un cuadricóptero. Hoy, la confiabilidad alcanzada permite operar con menos brazos sin sacrificar seguridad, simplificando el transporte, despliegue y mantenimiento de los drones.

eVTOL de EHang: de 4 a 8 brazos por redundancia y carga

En el campo de los eVTOL de transporte de personas, la trayectoria ha sido en cierto modo opuesta a la de DJI. La empresa china EHang, pionera en drones de pasajeros, comenzó con diseños de cuatro brazos en su modelo inaugural, pero luego incrementó el número de brazos/motores para mejorar la capacidad de carga y la redundancia en sus aeronaves de siguiente generación.

  • EHang 184 (2016): Fue uno de los primeros eVTOL monoplaza autónomos presentados al mundo. Este modelo empleaba una configuración de 4 brazos, cada uno con doble hélice coaxial contra-rotante, sumando 8 motores/hélices en total . En esencia, el EHang 184 era un cuadricóptero X8 de tamaño grande, capaz de llevar 1 pasajero (hasta ~100 kg). Sus hélices coaxiales le daban redundancia básica (podía soportar la falla de un motor y aún volar de forma controlada) al mismo tiempo que mantenían un formato compacto plegable. EHang confirmó que el 184 podía alcanzar hasta 100 km/h y volar unos 20–25 minutos por carga de batería en sus primeras pruebas . Se realizaron más de 1000 vuelos de prueba con este modelo para refinar la seguridad antes de pasar al siguiente diseño .

  • EHang 216 (2018): Para transportar dos pasajeros, EHang desarrolló el modelo 216, que ampliaba la filosofía del 184. El número “216” alude a 2 pasajeros y 16 hélices. En efecto, el EHang 216 tiene 8 brazos plegables, cada uno con dos rotores coaxiales, sumando 16 motores en total . Esta multicóptero de dos plazas logró mantener un rendimiento similar: aproximadamente 25 minutos de autonomía con 30–40 km de alcance por vuelo, cargando ~220 kg (dos personas) . La decisión de duplicar los brazos/motores obedece a razones técnicas de seguridad y potencia: con 16 hélices, la aeronave tiene propulsión redundante suficiente para seguir volando incluso si falla uno o dos motores/hélices . De hecho, la filosofía de Distributed Electric Propulsion (DEP) indica que múltiples motores pequeños aportan seguridad por redundancia; en el EH216, si uno o dos motores fallan, los demás pueden mantener el vuelo y aterrizar el aparato de forma segura . Esta configuración multicóptero robusta es más sencilla que helicópteros tradicionales (sin partes móviles complejas como rotor de paso variable) y reparte la carga entre muchos motores eléctricos, reduciendo el esfuerzo en cada uno. El EHang 216 también introdujo un sistema de 12 baterías redundantes trabajando en conjunto: el paquete de energía está dividido en 12 celdas/baterías independientes que operan como un sistema unificado, de modo que si falla una o varias, las restantes pueden sostener el vuelo . Este enfoque de redundancia total (motores múltiples, baterías múltiples, sistemas de control duplicados) refleja la prioridad absoluta de seguridad en el diseño. Gracias a ello, el EH216 ha completado más de 2.000 vuelos de prueba con pasajeros en diversas condiciones (vientos fuertes de hasta 70 km/h, niebla, vuelo nocturno) , acumulando un historial considerable para su certificación.

  • Variantes y mejoras: Sobre la plataforma 216, EHang desarrolló variantes especializadas como el 216F (versión de extinción de incendios, capaz de cargar 150 L de agente extintor en sus 16 hélices) y el 216L (versión logística de carga pesada, anunciada con hasta 200 kg de capacidad para transporte de mercancías) . Todas estas mantienen la configuración de 8 brazos/16 rotores, aprovechando la arquitectura redundante para aplicaciones diferentes. Técnicamente, la empresa ha ido optimizando componentes: el uso de motores brushless con control FOC (Field Oriented Control) en los rotores coaxiales garantiza alta potencia con menor generación de calor y mayor eficiencia . La estructura en fibra de carbono y aleaciones de aluminio aeronáutico mantiene bajo el peso total pese a llevar más motores. También el software juega un rol crítico: los EH216 incorporan sistemas de control de vuelo triplemente redundantes, auto-monitoreo continuo de salud de cada componente, y un centro de control terrestreque puede intervenir remotamente ante emergencias . En caso de detección de cualquier anomalía en vuelo, los algoritmos de fail-safe automáticamente trazarán una ruta segura de aterrizaje de emergencia para proteger a los ocupantes . En suma, EHang aumentó el número de brazos/motores de 8 a 16 al pasar del modelo 184 al 216 principalmente para escalar la carga útil (de 1 a 2 pasajeros) y garantizar redundancia suficiente bajo estándares aeronáuticos. El resultado es una aeronave confiable que, aunque más compleja que su antecesora, reparte la carga en más motores logrando un grado de seguridad “multi-motor” requerido para vuelos tripulados.

Comparativa técnica entre generaciones EHang: El salto del 184 al 216 implicó casi duplicar todos los subsistemas:

  • Propulsión: de 8 a 16 motores (coaxiales). Empuje total mucho mayor, permitiendo despegar con ~500 kg de peso bruto. Cada motor del EH216 produce unos kilovatios de potencia; en conjunto se logró volar con ~220 kg de carga útil (dos personas) vs ~100 kg en el 184 (una persona).

  • Redundancia: la probabilidad de fallo catastrófico disminuye exponencialmente al tener más motores. El 184, con 8 hélices, podía tolerar 1 fallo motor con dificultad; el 216, con 16 hélices, puede tolerar 2 o más fallos y aún aterrizar con seguridad . Adicionalmente, el 216 incorpora redundancia en baterías (12 módulos) y en electrónica (sensores y controladores duplicados), cosa que el 184 siendo prototipo inicial tenía en menor grado.

  • Baterías: El 184 usaba baterías LiPo de alta descarga agrupadas centralmente. En el 216, 12 baterías inteligentes en red aseguran que si una falla, las otras compensan . Esto mejora la confiabilidad y distribución de peso.

  • Autonomía: A pesar de llevar más peso y motores, la autonomía del 216 (≈25 min, ~30 km) es similar a la del 184 gracias a baterías de mayor capacidad y eficiencia mejorada de los motores/controladores. No obstante, el 216 lógicamente consume más energía total; para mitigar eso, EHang optimizó la aerodinámica (estructura más estilizada, menos arrastre) e incluyó hélices de mayor diámetro/paso optimizadas para vuelo de crucero eficiente.

  • Arquitectura eléctrica: El 216 opera con un sistema eléctrico robusto, probablemente de mayor voltaje que el 184 para alimentar el doble de motores sin aumentar excesivamente la corriente. Ello reduce pérdidas resistivas y mejora la respuesta de potencia. Además, el cableado y distribución se rediseñaron con múltiples buses de energía redundantes para alimentar todos los motores de forma confiable.

  • Software de control: El 184 ya volaba autónomo, pero el 216 lleva ese concepto a nivel comercial. Integra múltiples computadores de vuelo en paralelo que votan ante discrepancias, monitorizando miles de parámetros por segundo. También se conecta en tiempo real con centros de control (EHang Command Center) que pueden intervenir manualmente o supervisar múltiples aeronaves en flota . Esta inteligencia colectiva no existía en el 184 de forma tan desarrollada.

  • Seguridad certificable: EHang diseñó el 216 para cumplir estándares aeronáuticos (redundancia, análisis de riesgos, pruebas). Ha pasado pruebas ambientales extremas (temperaturas, humedad, salinidad, lluvia intensa) y obtenido certificación de calidad aeroespacial AS9100D . El 184 en cambio fue un demostrador tecnológico no certificado formalmente. Esto marca la madurez técnica alcanzada en pocos años.

En síntesis, EHang inició con un cuadricóptero coaxial (4 brazos) para un pasajero y evolucionó a un octocóptero coaxial (8 brazos) para dos pasajeros, duplicando propulsores para lograr más empuje y cumplir exigentes criterios de seguridad. Este camino inverso al de DJI (que redujo brazos con el tiempo) se debe a que los eVTOL de pasajeros tienen requerimientos de seguridad redundante mucho más estrictos: deben garantizar un aterrizaje seguro aun con varias fallas, dado que hay vidas humanas a bordo. Por eso actualmente vemos eVTOL multicópteros con numerosas hélices (16, 18, etc.). No obstante, las mejoras tecnológicas constantes podrían permitir que, a largo plazo, también estas aeronaves tripuladas reduzcan el número de rotores sin comprometer la seguridad, tal como se explora a continuación.

Innovaciones tecnológicas que permiten operar con cuatro brazos

Varias mejoras tecnológicas transversales en la última década explican por qué hoy es viable operar drones grandes (e incluso eVTOL) con solo cuatro brazos, algo que antes requería diseños de seis u ocho:

  • Motores eléctricos más potentes y eficientes: Los avances en imanes, electrónica de control y diseño de bobinados han incrementado dramáticamente la densidad de potencia de los motores brushless. Un solo motor moderno puede entregar varios kW de potencia continua (ejemplo: ~4 kW por rotor en el DJI FlyCart 30 ) manteniendo alta eficiencia. Esto significa que 4 motores hoy pueden hacer el trabajo que 6 u 8 hacían antes. Además, nuevos sistemas de control vectorial (FOC) optimizan el par motor a cada instante, reduciendo el calor y el desgaste . Los motores actuales también incorporan mejor refrigeración (diseños de ventilación integrados, materiales magnéticos de alta temperatura) que les permiten funcionar de forma confiable bajo cargas intensas, donde antes se corría riesgo de sobrecalentamiento si no había motores adicionales para alivianar la carga.

  • Configuraciones coaxiales y hélices optimizadas: La adopción de hélices coaxiales contrarrotatorias (dos por brazo) es una solución de compromiso que entrega los beneficios de mayor número de motores usando solo cuatro brazos físicos. DJI y EHang han explotado esta arquitectura: en un dron coaxial, la hélice superior e inferior de cada brazo giran en sentidos opuestos, contrarrestando el par y aumentando la sustentación en un área compacta. Si bien las hélices coaxiales pueden tener una ligera pérdida de eficiencia por interferencia mutua de flujo, se compensa con diseño aerodinámico (variando el paso, separación y diámetro para minimizar perturbaciones). La ventaja es un marco más ligero y menos voluminoso: cuatro puntos de anclaje en vez de seis u ocho simplifican el fuselaje. DJI reportó que en el Agras T40 el diseño de rotor coaxial aumentó en 30% la capacidad de carga respecto a su predecesor , precisamente al concentrar la potencia en menos brazos robustos. Además, un brazo coaxial puede perder uno de sus dos motores y el motor restante aún provee algo de empuje, evitando un vacío total de sustentación en esa esquina – otro factor que mejora la tolerancia a fallos.

  • Baterías de alta densidad y sistemas de energía redundantes: La energía eléctrica disponible por kilogramo de batería se ha incrementado, gracias a nuevas químicas de litio y mejores sistemas de gestión. Drones antiguos necesitaban múltiples baterías en paralelo para alimentar muchos motores (ej. el DJI M600 usaba 6 baterías inteligentes en conjunto). En cambio, modelos recientes usan una o dos baterías de mayor capacidad con arquitecturas de voltaje elevado, simplificando el sistema. Por ejemplo, el Matrice 300/350 usa 2 baterías HV de click, que permiten hot-swap (reemplazo en caliente) y cuentan con circuitos de gestión redundante; incluso si una batería falla, la otra puede sostener el vuelo un tiempo limitado. EHang llevó esto al extremo con 12 módulos de batería en el EH216 trabajando en redundancia activa . Esta modularidad asegura potencia confiable para pocos motores sin riesgo. En el futuro, la adopción de baterías de nueva generación (estado sólido, mayor voltaje nominal, recarga ultrarrápida) e incluso la hibridación con sistemas de celda de combustible podría proporcionar tanta energía que solo hagan falta 4 motores para cualquier misión, eliminando la necesidad de redundar por limitaciones de potencia.

  • Electrónica de control y sensores mejorados: Los modernos controladores de vuelo pueden detectar variaciones ínfimas en la velocidad o corriente de cada motor y actuar en microsegundos para compensarlas. Esto hace posible mantener estable un cuadricóptero aun frente a perturbaciones o fallos incipientes. Un ejemplo es la función de aterrizaje con 3 hélices del DJI M300 RTK: el controlador identifica inmediatamente la pérdida de empuje en un motor (por fallo o ESC averiado) y activa un modo de emergencia en el que ajusta los otros tres motores y hace girar la aeronave para lograr control giroscópico . Sin sensores IMU precisos y control en tiempo real, esto no sería posible. Hoy, los drones llevan sensórica redundante (doble IMU, doble barómetro, GPS+RTK dual) que alimenta algoritmos de fusión robustos; así, la navegación sigue siendo confiable sin importar qué cuatro motores soporten el vuelo. En eVTOL, donde la seguridad es crítica, sistemas electrónicos triredundantes y chequeos constantes aseguran que un vehículo de 4 brazos podría manejar un fallo si la computadora distribuye instantáneamente la carga a los demás motores y activa un plan de contingencia (por ejemplo, transición a planeo o despliegue de paracaídas balístico). Esta inteligencia artificial de vuelo es el gran habilitador de diseños más simples.

  • Materiales ligeros y diseño estructural avanzado: Construir drones de más de 4 brazos implica añadir peso extra en brazos, uniones y trenes de aterrizaje. La adopción de fibra de carbono en chasis y brazos (como en DJI S1000, M300, EHang 216) brinda alta rigidez con bajo peso, permitiendo estructuras de 4 brazos capaces de soportar grandes cargas sin flexión excesiva. Asimismo, la ingeniería de las estructuras ha avanzado: análisis FEM optimizan las placas centrales, y diseños plegables inteligentes facilitan el transporte sin debilitar puntos críticos. En suma, hoy un cuadricóptero grande puede ser físicamente robusto, donde antes un hexacóptero era preferido para “repartir” esfuerzos estructurales. Menos brazos significan menos puntos de falla mecánicos, menos vibraciones y menos mantenimiento (por ejemplo, calibrar 4 ESC y 4 motores en lugar de 8). Esto reduce costos operativos y aumenta la disponibilidad de las unidades en campo, un factor importante para adopción comercial.

Todas estas innovaciones convergen para que un diseño de cuatro brazos bien concebido alcance (o supere) el rendimiento de uno de seis u ocho brazos de la generación anterior, con igual o mayor seguridad. La redundancia ya no se logra solo añadiendo brazos/motores, sino con una combinación de hardware fiable y software inteligente. Los drones DJI actuales y los eVTOL de EHang incorporan suficientes salvaguardas (motores coaxiales, baterías múltiples, control adaptativo) para que, aunque físicamente sean cuadricópteros, ofrezcan redundancias equivalentes a las de un octocóptero clásico. Esto abre la puerta a un futuro donde incluso los vehículos aéreos tripulados simplifiquen su configuración.

Hacia el futuro: ¿eVTOL de pasajeros con cuatro brazos?

Considerando la trayectoria tecnológica, es razonable proyectar que los eVTOL de transporte de personas eventualmente migren también hacia configuraciones de cuatro brazos, similares a los drones modernos. Si bien hoy predominan diseños con muchos rotores por motivos de certificación y seguridad, varias tendencias indican que a medida que la tecnología madure, se podrá lograr la misma seguridad con menos rotores:

  • Eficiencia aerodinámica y energética: Menos rotores generalmente implican menor arrastre y mayor eficiencia en crucero. Cada brazo adicional añade resistencia parásita (motores, brazos, soportes) y los rotores pequeños suelen operar a RPM altas menos eficientes. Un futuro eVTOL cuadricóptero podría montar 4 rotores de gran diámetro (o ducted fans) optimizados para empuje vertical y traslación, reduciendo el consumo. De hecho, NASA ha estudiado conceptos de eVTOL puramente cuadricópteros tanto para 1 pasajero como hasta 6 pasajeros (≈1200 lb de carga útil) en su investigación de UAM, demostrando que es viable desde el punto de vista de diseño conceptual . En esos estudios, con rotors grandes de paso variable, un quadrotor de 6 pasajeros podría volar eficientemente y manejar control de forma aceptable. Esto sugiere que, superados los retos de control, cuatro rotores pueden escalarse para vehículos mayores, con el beneficio de menor complejidad mecánica.

  • Redundancia mediante otras vías: La seguridad no tendría que venir únicamente de duplicar motores. Sistemas de respaldo como paracaídas balísticos inteligentes (ya vistos en el FlyCart 30 y en algunos eVTOL experimentales) pueden entrar en acción ante una falla catastrófica de propulsión, salvando a los ocupantes. También hay diseños de quadrotor con alas: por ejemplo, eVTOL de despegue vertical con 4 hélices basculantes (tilt-rotors) que luego vuelan como avión. En modo avión, pueden planear sin motor; en modo hover, aunque uno falle, quizá los otros puedan compensar parcialmente junto con superficies de control aerodinámicas. Algunas empresas han explorado reducir rotores: Bell Nexus, un concepto de taxi aéreo inicialmente de 6 rotores ductados, evolucionó a una versión Nexus 4EX con solo 4 ducted fans más grandes, una vez que el análisis mostró suficiente desempeño con menos unidades. Esto ejemplifica la tendencia a simplificar diseños a medida que se comprende mejor la dinámica y fiabilidad de cada componente.

  • Confiabilidad extrema de motores y baterías: A largo plazo, los motores eléctricos podrían alcanzar niveles de confiabilidad comparables a los motores de reacción comerciales (muy baja probabilidad de fallo). Con tecnologías como motores superconductores (en investigación para aeronaves eléctricas) se podrían tener 4 motores ultra-potentes con redundancias internas (varios circuitos de bobinas independientes dentro de un mismo motor, por ejemplo). Si la probabilidad de fallo de un motor cuádruple es lo suficientemente remota, cuatro de ellos bastarían para un eVTOL certificado. Asimismo, las futuras baterías estado-sólido prometen mayor densidad y seguridad (menor riesgo de incendio), reduciendo la necesidad de múltiplas baterías redundantes. Un sistema eléctrico con autoprotección y autoreconfiguración podría reaccionar instantáneamente ante cualquier célula anómala sin afectar el flujo de potencia a los motores, igual que un cerebro humano compensa pequeñas pérdidas sin dejar de funcionar. En suma, la fiabilidad intrínseca de cada componente aumentará al punto que la redundancia pasiva (muchos motores) podrá reemplazarse por redundancia activa (control inteligente y componentes ultra-confiables).

  • Mantenimiento y costes: Un eVTOL con 4 motores tendría importantes ventajas en mantenibilidad y coste operativo. Menos motores y partes significan menos revisiones, menos piezas de recambio y menor probabilidad de error humano en mantenimiento. Para operaciones comerciales tipo aerotaxi, esto es crítico para la viabilidad económica. Las autoridades de certificación también considerarían que una arquitectura más simple es más fácil de analizar y validar (cada motor, batería o controlador es un punto a certificar; ocho motores duplican el trabajo respecto a cuatro). Siempre que se demuestre que la seguridad no se ve comprometida, simplificar el diseño será deseable. Actualmente, los multicópteros con 16+ rotores crean desafíos de inspección pre-vuelo, chequeos de firmware, calibraciones, etc., que se multiplican con cada motor extra. Reducir a la mitad esos subsistemas manteniendo la seguridad simplificaría enormemente la operación diaria. El reto está en convencer a reguladores de que otras medidas de mitigación (paracaídas, aterrizaje automático inmediato, etc.) garantizan la seguridad equivalente.

  • Evidencia de convergencia: Ya vemos pasos hacia configuraciones más simples en proyectos actuales. Por ejemplo, varios eVTOL de ala fija con despegue vertical usan 4-6 hélices de elevación que luego se apagan en vuelo de crucero (Joby Aviation usa 6 rotores basculantes; ASKA y Beta Aviation integran 4 grandes hélices + alas). A medida que se gane confianza, no es descabellado pensar en diseños “quad” puros. Incluso en el ámbito de drones de carga no tripulados, empresas están optando por quadrotors coaxiales en lugar de octocópteros para trasladar paquetes pesados, confiando en la electrónica para cubrir emergencias. La investigación académica y de industria respalda esta dirección: NASA, en sus referencias de diseño UAM, incluye quadcopters a gran escala como concepto válido , y ha analizado su control y acústica. Se están afinando algoritmos para controlar cuadricópteros grandes con paso variable que podrían mantener control con un rotor menos a través de vectores de empuje inclinados, lo que proporcionaría redundancia controlada en un diseño de cuatro brazos.

En conclusión, es muy probable que los eVTOL del futuro tiendan hacia configuraciones de cuatro brazos/motoresa medida que la tecnología lo permita. El camino marcado por DJI en drones – reducir complejidad manteniendo prestaciones – es un antecedente alentador. Por supuesto, en el ámbito de transporte de personas, cualquier cambio debe estar respaldado por rigurosos análisis técnicos y certificaciones. No veremos taxis aéreos de cuatro rotores hasta que se demuestre contundentemente que pueden volar con la misma seguridad que uno de ocho. Pero los argumentos técnicos expuestos (motores más potentes y fiables, control inteligente de fallos, mecanismos alternativos de seguridad) sugieren que esa convergencia es viable.

Las propias compañías eVTOL podrían estar considerando estos escenarios en sus roadmaps. Es posible que veamos primero eVTOL híbridos, con 4 brazos coaxiales (8 hélices), como un paso intermedio: por ejemplo, un futuro EHang biplaza con 4 brazos pero manteniendo 8 motores (similar a su modelo 184 pero escalado a dos pasajeros con tecnología actual). Esto combinaría redundancia con simplicidad de brazos. Conforme aumente la confianza, el siguiente salto sería un quadrotor puro. Las ventajas en eficiencia, coste y simplicidad serían enormes, y la tecnología de control disponible en 2030+ probablemente hará de la falla de un motor un evento manejable y no catastrófico – tal como hoy lo es para un avión comercial perder un motor y continuar vuelo con los restantes.

En resumen, la historia de DJI y EHang muestra caminos opuestos pero convergentes: DJI simplificó drones gracias a la tecnología, EHang complicó vehículos para lograr seguridad. Ambas líneas avanzan con la tecnología hacia un punto medio ideal: el cuadricóptero altamente fiable. Con mejoras continuas en motores, baterías, materiales y algoritmos, todo apunta a que la próxima generación de eVTOL podrá adoptar configuraciones de cuatro brazos sin sacrificar redundancia ni seguridad, haciendo realidad vehículos aéreos más eficientes, fáciles de operar y mantener, cumpliendo a la vez los estrictos estándares de la aviación tripulada.

Fuentes: La investigación se apoyó en documentación oficial y técnica, incluyendo whitepapers de DJI (por ejemplo, sobre el aterrizaje de emergencia en tres hélices ), especificaciones de productos DJI recientes (Matrice 300/350, Agras T40/T50, FlyCart 30) y comunicaciones de EHang (páginas de diseño y seguridad de la serie 216 ). Asimismo, se consultaron análisis de terceros (NASA, evtol.news) sobre diseños quadrotor a gran escala y características de seguridad redundante en eVTOL actuales . Estas fuentes sustentan el panorama evolutivo y las proyecciones aquí descritas. Cada cita específica se ha incluido en el texto para validar los datos clave presentados.

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